Casos de éxito

Cuando se prueban las soluciones técnicas

Caso de éxito
Resolución de problemas de obstrucción en estaciones de bombeo de aguas residuales

23/08/2017

Resolución de problemas de obstrucción en estaciones de bombeo de aguas residuales




Antecedentes

 
La nueva bomba compacta para aguas residuales Flygt 3069 ha resuelto problemas de obstrucción sumamente complejos en varias estaciones de bombeo en Europa. La nueva bomba cuenta con la tecnología N™ Adaptativa, que evita obstrucciones y reduce el uso de energía. En este caso de éxito se muestran los resultados de dos ensayos realizados a largo plazo en estaciones de bombeo de los Países Bajos e Italia.
 


Italia: Estación de bombeo Via Visan Malo

 
La estación de bombeo municipal de aguas residuales Via Visan Malo está ubicada en un pequeño pueblo de la provincia de Vicenza, en el norte de Italia. La estación tenía severos problemas debido a las considerables obstrucciones causadas por el alto nivel de residuos en las aguas residuales del municipio. En 2012, los operadores de la estación acordaron la instalación y prueba de un prototipo de la nueva bomba para aguas residuales Flygt 3069 de Xylem con el fin de abordar estos problemas.
 


Mantenimiento imprevisto y costoso

 
El mayor problema que enfrenta la estación de aguas residuales es la elevada concentración de materiales sólidos y abrasivos que el sistema de aguas residuales del municipio envía a la planta. En el pasado, estos materiales ocasionaban la obstrucción de las bombas de la estación al menos tres o cuatro veces por año, lo que, con frecuencia, obligaba a la estación a soportar ciclos de mantenimiento imprevistos y costosos.
 
Las operaciones de mantenimiento en la estación eran tan dilatadas, que las bombas debían ser retiradas del lugar y recibir mantenimiento hasta tres veces por año, obligando a los operadores a suministrar costosas bombas de repuesto para evitar la interrupción de las operaciones. Alto Vicentino Servizi, la empresa que administra la estación, sabía que se necesitaba una solución que permitiera un bombeo confiable y encarara el problema de los crecientes costos de mantenimiento y energía.
 


Cómo funciona la tecnología N Adaptativa

 
Normalmente, las bombas se obstruyen cuando pasan por ellas objetos sólidos que quedan atrapados en uno de los bordes delanteros del álabe del propulsor. Los materiales se deslizan entonces hacia el perímetro de la entrada y obstruyen el sistema. Con la revolucionaria tecnología N Adaptativa, los objetos sólidos, por el contrario, se deslizan a lo largo de la punta del álabe del propulsor, dentro de la ranura de alivio.
 
 
 
 
Una espiga de guía en el anillo de inserción aparta los materiales sólidos del centro del propulsor, a lo largo del borde delantero y a través de la ranura de alivio. De ser necesario, el propulsor se desplaza axialmente hacia arriba, permitiendo que el material sólido y los residuos pasen con facilidad.
 


Sin obstrucciones durante más de 5.000 horas de bombeo

 
Durante el período de prueba de cuatro años del prototipo, los operadores observaron que la bomba compacta permitía un bombeo continuo sin obstrucciones, a pesar de la dificultad que ofrecen las aguas residuales que procesa la estación. Desde su instalación, ha funcionado sin interrupción durante más de 5.000 horas de bombeo, con hasta diez arranques del sistema por día.
 
Los operadores de la planta también se mostraron satisfechos al observar que la eficiencia operativa mejoró considerablemente en las estaciones de bombeo gracias a la nueva tecnología. La acumulación de residuos con el paso del tiempo ralentiza considerablemente la eficiencia del propulsor de la bomba, requiriéndole un esfuerzo mayor, lo que aumenta el consumo de energía. Con la bomba compacta Flygt, se reduce la tensión en el eje, las juntas y los cojinetes, asegurando un uso de la energía reducido y sostenible.
 


Mayor caudal y eficiencia energética

 
Desde su instalación en la estación de bombeo Via Visan Malo, la nueva bomba también ha podido manejar un caudal más grande que el de su predecesora (10,5 litros por segundo frente a los 7,5 litros por segundo anteriores).
 
A pesar del mayor caudal, el tiempo de bombeo en la estación es más rápido y más eficiente, lo que permite un ahorro general de la energía en la planta del 10%, por lo menos.
 


Países Bajos: estación de bombeo Platenmakerstraat

 
Ubicada en la localidad de Elst en el municipio de Overbetuwe, la estación de bombeo Platenmakerstraat recibe aguas residuales con un alto contenido de materiales, como prendas de vestir y objetos sanitarios de uso personal. Estos materiales difíciles causaban obstrucciones severas y frecuentes, lo que significaba que los operadores de la estación de bombeo debían desatascar la bomba prácticamente cada semana.
 


Una solución de bombeo de dimensiones reducidas

 
En el intento de resolver este problema, el municipio acordó probar la nueva bomba compacta para aguas residuales Flygt 3069. La bomba se instaló en la estación Platenmakerstraat en noviembre de 2012, con lo cual se inició un período de prueba de tres años y medio.
 
Los operadores de la estación Platenmakerstraat deseaban una solución de bombeo de dimensiones reducidas que garantizara máxima confiabilidad, menor consumo de energía y redujera la necesidad de mantenimiento no programado.
 


Drástica reducción de las visitas técnicas in situ y el uso de energía

 
Los operadores de la estación de bombeo de aguas residuales observaron una mejora considerable gracias a la nueva solución. Las obstrucciones se redujeron de un promedio de 50 veces por año a solo una o dos veces por año, lo que redujo los costos de mantenimiento anuales en €8.500. Si bien el consumo de energía no se midió rigurosamente durante la prueba, se calcula que se redujo en un 40%. La nueva bomba sustituyó un propulsor de vórtice, que usa más energía.
 
“Me sorprendió la calidad de bombeo que hizo posible el prototipo”, señala Wim Hermsen, mecánico externo del municipio de Overbetuwe. “La naturaleza complicada de las aguas residuales significó que la bomba debía realizar un trabajo verdaderamente arduo – en algunos momentos, la bomba funcionaba sin interrupción hasta por 72 horas – pero permitió sistemáticamente un bombeo sin obstrucciones durante toda la prueba. En el transcurso de toda la prueba, tuvimos que desatascar la bomba apenas cuatro o cinco veces, y ello se debió a las prendas de vestir grandes y las latas de gaseosa que quedaron atrapadas en el caudal de aguas residuales.”
 
 
 

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