Los recursos hídricos de la cuenca del lago Chad son la fuente de alimento y de desarrollo económico de la región. El agua se destina principalmente a la agricultura, intensiva en algunas áreas de Nigeria y Camerún.

 

Si bien actualmente la disponibilidad de agua no es un factor limitante al desarrollo, el aumento de las extracciones puede causar impactos significativos en los ecosistemas, especialmente en aquellos países que comparten recursos y en los que la gestión transfronteriza de los recursos hídricos adquiere mayor dificultad.

 

Además, esta situación cobra especial relevancia en un escenario de cambio climático, que prevé el aumento de la temperatura, evapotranspiración e intensificación del ciclo hidrológico. En 2012 se adoptó el Water Charter, actualmente ratificado por cuatro Estados Miembros, con el objetivo de promover el desarrollo sostenible a través de la gestión integrada, equitativa y coordinada de los recursos naturales superficiales y subterráneos. Uno de los objetivos es el conocimiento de la dinámica de los procesos hidrológicos y en especial la actualización de un modelo de aguas subterráneas que contemple toda la información disponible hasta la actualidad.  Disponer de un modelo actualizado es fundamental para comprender la dinámica actual del agua subterránea, las relaciones entre aguas superficiales y acuíferos existentes, y para estimar los valores de recarga y extracción. Además, su conocimiento cobra especial importancia al tratarse de un acuífero transfronterizo.

 

El estudio ha actualizado el modelo conceptual de toda cuenca del lago Chad, a partir de la integración de los datos actualmente disponibles y ha desarrollado un modelo de flujo del agua subterránea de la Formación Chad “3D cuasi-estacionario”, basado en MODFLOW 2005 con ModelMuse 3.5, que permite la simulación de la dinámica del agua subterránea a nivel regional. El modelo permite la estimación de los flujos subterráneos transfronterizos entre los diversos Estados Miembros. 

 

No existe un enfoque estándar para distribuir recursos hídricos complejos en las cuencas transfronterizas, generalmente depende de negociaciones entre las partes involucradas. Una distribución equitativa de los recursos y su gestión plantea muchos desafíos que incluyen desde la armonización de estrategias de gestión hasta la puesta a punto del monitoreo de forma conjunta entre países. Identificar las zonas sensibles a impactos transfronterizos puede ayudar a determinar qué áreas sufrirán posibles cambios cuantitativos en el nivel del agua subterránea, calidad del agua o condiciones artesianas.

 

Es necesario mejorar la cooperación internacional y las estrategias de gestión compartida para prevenir y mitigar los conflictos transfronterizos, y poder así asignar los recursos de agua subterránea de manera más eficiente. El uso de modelos constituye una herramienta de apoyo importante para dicho fin.