13/03/2023 Recibida con sorpresa, aunque esperada, la creación de una nueva asociación de gestores y empresas de aguas en nuestro país. Desde mi punto de vista en los tiempos que se nos avecinan, con normativas cada vez más exigentes (técnica y económicamente) la división del sector, pues de eso se trata, y el no presentar una voz común como antaño frente a la administración va a representar un serio hándicap de credibilidad y de déficit en la defensa de nuestros intereses.
No se me ocultan maniobras económicas y aún más, políticas, tras esta actuación que, inisisto, no es en absoluto ni buena ni positiva para el sector. Siempre los gestores de aguas nos hemos caracterizado por el acuerdo, el consenso y por potenciar el avance de todos los que nos dedicamos a gestionar el ciclo integral del agua tanto en labores técnicas como de gobernanza.
Desde hoy estamos más dispersos, más desunidos y con menos fuerza ante nuestros interlocutores en España y en la Unión Europea.
Quienes hayan sido responsables de esta situación, a buen seguro tendrán que responder en un futuro más o menos próximo por este convulso escenario.
Después de 41 años en el sector, para mí, permítanmelo, es un día triste.